Bacterias probióticas, cuya acción en el intestino se potencia con la ayuda de la fibra prebiótica, así como las vitaminas y minerales que contiene.
Su consumo diario te ayuda a:
1. Regenerar y equilibrar la flora intestinal, necesaria para la correcta asimilación de los nutrientes, así como la protección inmunológica del organismo.
2. Prevenir trastornos digestivos.
3. Recuperar la flora intestinal luego del uso de medicamentos, como los antibióticos, que destruyen el ecosistema intestinal.